Vacunación infantil en caída: la alarma que vuelve a encenderse en Argentina

Las tasas de vacunación están por debajo del 50%. Este fenómeno se replica a nivel global, generando preocupación.

El panorama nacional, analizado por el médico pediatra Enrique Orschanski, es contundente: los niveles de vacunación infantil han caído a cifras que no se registraban desde hace décadas. “Vacunas clave, como las que previenen la poliomielitis, el sarampión o la difteria, han caído a tasas de aplicación inferiores al 50%, cuando hasta hace pocos años superaban el 90%”, detalló.

Uno de los ejemplos más preocupantes es el de la vacuna triple viral, que protege contra sarampión, rubéola y paperas y es obligatoria para los niños de cinco años. “Entre 2009 y 2019 la cobertura llegaba en promedio al 90%. El año pasado solo alcanzó al 46,7%”, puntualizó Enrique. El descenso también se replica en otras inmunizaciones esenciales: la vacuna contra la poliomielitis cayó del 90% al 47,6% en el mismo período, mientras que la que previene difteria, tétanos y tos ferina se derrumbó del 93% al 46,4%.

¿Cómo puede ser que estemos en esta situación?. La preocupación no es solo local. Un reciente estudio publicado en The Lancet confirma un freno en las tasas de vacunación infantil a escala planetaria: millones de niños están quedando desprotegidos frente a enfermedades prevenibles.

Los factores son múltiples, pero dos se destacan: la expansión de conflictos bélicos y la insuficiencia de fondos para los programas internacionales de vacunación. “Es preocupante, por ejemplo, la postura del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que busca recortar los fondos destinados a estos programas”, advirtió.

Mientras Argentina mira con alarma sus propias cifras, el mundo atraviesa un escenario que combina desinformación, crisis políticas y falta de recursos. En un contexto así, la vieja canción de Walsh recupera vigencia: recordar que la ciencia salvó y salva vidas no es un gesto nostálgico, sino una necesidad urgente.